En esta ocasión vamos a trasladarnos a un lugar donde
Errantia por el mundo no ha estado todavía, más concretamente hasta la ciudad
de Beechworth en el estado de Victoria en Australia. Os preguntaréis como hemos
venido a parar hasta aquí. Pero es que aquí nos encontramos a otro de los
hospitales abandonados más encantados del mundo, más concretamente el
psiquiátrico de Beechworth Lunatic Asylum, también conocido como Marday Hills
Lunatic Asylum. Si tuviéramos que subrayar un lugar como infierno sobre la
tierra, posiblemente sea este. Normalmente las personas acuden a estos centros
sanitarios para sanar de sus enfermedades, en este caso enfermedades mentales,
pero tristemente esto no fue así en este lugar de los horrores, donde las
personas más bien iban a sufrir una terrible agonía y un horrible sufrimiento,
hasta que a muchos les llegara la muerte. ¿Os atreveréis a emprender este
espeluznante viaje con nosotros?
Este hospital fue el cuarto construido en el estado de
Victoria y el tercero en cuanto a su tamaño. Los terrenos del antiguo
psiquiátrico albergan la friolera de 106 hectáreas. Era tan grande el sitio que
en su época, el hospital apenas necesitaba que le abastecieran desde fuera, ya
que contaba con sus propios campos de cultivo, huertos, establos y pocilgas.
Este lugar estaba construido sobre una colina, ya que los que lo construyeron,
pensaron que los vientos que había allí se llevarían las enfermedades mentales
de los que aquí se encontraban. En
cuanto a camas este sitio llegó a tener más de 1200 camas, que siempre estaban
ocupadas.
El psiquiátrico de Beechworth fue construido a mediados del
siglo XIX, más concretamente en 1867 y como hemos dicho siempre estuvo completo,
esto se debe a que muchos de los pacientes que aquí estuvieron ingresados para
sanar de sus enfermedades mentales, jamás salieron de allí pese a estar
completamente curados. De hecho se piensa que la mayoría de sus residentes no
padecían ningún tipo de enfermedad mental. Era muy fácil entrar, debido a que
solo eran necesarias las firmas de dos médicos y un familiar, mientras que para
salir eran necesarias ocho firmas.
Psiquiátrico de Beechworth (Photo found online) |
El lugar más temible de este psiquiátrico era el ala de
Grevillia, para muchos el infiernos sobre la tierra. En esta parte del hospital
sus pacientes eran encadenados a sus camas y atados con camisas de fuerza.
Igualmente hasta la década de los cincuenta, cuando se introdujeron los
medicamentos para las patologías mentales, los pacientes eran tratados con
largas terapias de electroshock, tan fuertes que en algunos casos se llegaron a
romper huesos y a astillar dientes.
Otras torturas que muchos aquí sufrieron fueron tan salvajes
que cuesta creérselo. Por ejemplo una de las terapias más habituales era sentar
a un paciente en una silla giratoria, que giraba a tal velocidad que en algunos
casos llegaban a sangrar por ojos, nariz y boca. Del mismo modo otra de las
torturas a las que estos se veían condenados consistía en introducir sus
cabezas en cajas de sal durante horas e incluso días.
También una de las cosas más habituales que aquí ocurrieron
fue que muchos de los pacientes se
vieron condenados a realizar trabajos forzosos que en algunos casos les causó
la muerte. Todos estos pacientes vivían peor que los animales ya que la higiene
era bastante limitada, llegando a haber incluso cucarachas y ratas entre los
enfermos. También se habla de que algunos de estos pacientes fueron maltratados
y violados por parte del personal sanitario, que en teoría debería haber hecho
todo lo posible para que sanasen y salieran de este infierno. También cuentan
que los pacientes se pegaban y violaban entre sí, sin que nadie los separara.
Este sitio por lo tanto fue un auténtico infierno sobre la
tierra, hasta que en 1995, cerró definitivamente sus nefastas y atroces
estancias. Se calcula que durante sus 128 años de negra historia perecieron
casi 9000 pacientes. Realmente viendo lo visto, la muerte era una liberación
para estas personas, ya que era prácticamente la única manera de salir de este
infierno.
Todas estas muertes y atrocidades vividas en este lugar,
como os podréis imaginar han desencadenado en todos los fenómenos paranormales
que os vamos a contar a continuación. Este sitio cuenta con varias apariciones
que suelen ser las más habituales. La primera de ellas es la de un médico, que
a modo de espectro realiza su patrulla nocturna una y otra noche. Otra de las
apariciones más frecuentes es el de una matrona, que se suele aparecer en varias
estancias del antiguo psiquiátrico. Según cuentan algunos ella era la única que
intentaba calmar la agonía y el dolor de los pacientes. Muchos afirman que
cuando se va a aparecer, sienten una enorme tranquilidad y sensación de
bienestar.
Una de las apariciones más frecuentes es la de una mujer
fumando, que fue arrojada al vacío por un paciente que quería robarle el
tabaco. Hay testigos que afirman que ven caer a esta señora desde una ventana
del cuarto piso. Lo más triste de esta historia es que hay testigos que
aseguran que el cuerpo de la mujer
permaneció dos días donde había caído, debido a que era judía y su cuerpo no
podía ser levantado hasta que no se acercara un rabino viera el cadáver. Este tardó dos días en llegar a este lugar.
Otras apariciones son las de enfermos que buscan su eterno
descanso, el cual no consiguen encontrar debido a que, sufrieron tanto en este
sitio que de algún modo les impide abandonarlo. Muchos han sido testigos de
fenómenos como pasos, ruidos extraños, sombras e incluso lamentos y gritos
espeluznantes que tuvieron que erizarles el pelo de su cuerpo.
Sin ninguna duda este es el sitio más terrible del que os
hemos hablado hasta ahora, superando para mí las historias del viejo Waverly
Hills. Si nosotros nos estremecemos con estas historias, imaginémonos como
tuvieron que pasarlo aquellos que allí estuvieron. Creo que en ninguna de
nuestras peores pesadillas podríamos pensar en algo así.
Víctor H.S.
Estoy verdaderamente impresionada, a ver, todas las semanas escucho El Despertar del Cementerio, Rumbo Infinito, a veces La escóbula de la brújula y milenio 3 y veo cuarto milenio. Pues casi nunca se me pone la piel de gallina, pues leyendo este reportaje se me han puesto los pelos de punta. Impresionada del pensamiento de la época, impresionada del cierre en 1995, alucino pensé que diríais que hacía muchos años que lo habían cerrado, e impresionada por esa cifra 9000 personas, 9000 almas, no tengo palabras, gracias.
ResponderEliminarEl sitio es espeluznante, en parte muestra hasta que límites de barbaridad puede llegar el ser humano. A la hora de redactarlo sinceramente tuve mis dudas con publicarlo, porque realmente me parecía increíble, toda esa información que había encontrado, pero tristemente es real y como este habrá muchos en todo el mundo.
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