Seguimos dando vueltas alrededor del mundo en nuestra
incesante búsqueda de los lugares más encantados del planeta. Nuestra última
parada como recordaréis fue en el hotel Waitomo Caves en Nueva Zelanda.
En esta ocasión no cambiamos de establecimiento, ya que
nuestro protagonista de hoy también es un hotel, pero si cambiamos de país.
Esta vez cruzamos el charco y nos vamos hasta Canadá, más concretamente hasta
el Parque Nacional de Banff, en el estado de Alberta. Se trata de un lugar cuya
naturaleza es espectacular. Pero entre tanta belleza se encuentra un sitio en
el que han sucedido cosas inexplicables, como extrañas apariciones y gritos
desgarradores del más allá.
El hotel Banff Springs, nuestro protagonista de hoy, es
considerado el lugar más encantado del estado de Alberta y de los más
encantados de Canadá. Este inmenso edificio cuenta con más de 700 habitaciones
de lujo. Es un sitio que solo se pueden permitir las grandes fortunas.
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| Hotel Banff Springs (Photo found online) |
Este bello hotel de las montañas rocosas de Canadá, fue
construido a finales del siglo XIX, más concretamente en 1888. Inicialmente el
hotel fue construido de madera, algo que unos años después lamentarían ya que,
se quemó por completo en 1926 mientras se realizaban reformas. Tras cuatro años
de reconstrucción el establecimiento, ahora de estilo baronial escocés, fue
reabierto a principios de los años 30 y pasó de las 250 habitaciones iniciales
hasta las 778 que tiene actualmente.
En principio podrías pensar y ¿que tiene este hotel para
estar encantado? La primera historia de encantamiento en el hotel, la
encontramos en que este sitio cuenta con una novia fantasma. Esta es
posiblemente la historia más triste del lugar, ya que, una joven que se iba a
casar con su prometido falleció antes de hacerlo al tropezar con su vestido de
novia y caer escaleras abajo, muriendo justo antes del enlace. Son muchos los que han
asegurado verla por los salones y las escaleras del edificio. Casi todos
afirman verla en busca de su prometido, con el cual jamás llegó a casarse. Esta
puede que sea una leyenda, si no fuera porque ha sido vista por gente que
desconocía esta triste historia.
El fantasma más popular y más veces visto en Banff Springs
es el de un antiguo botones, llamado Sam Mc Cauley. Sam fue botones en este lugar durante más de
50 años, por lo que quería sobre todas las cosas en el mundo a este hotel.
Dicen que cuando se retiró en 1978, su salud empezó a deteriorarse hasta tal
punto, que el botones falleció. Eso sí, al querer tanto a este hotel su
espíritu volvió hasta Banff Springs para seguir haciendo aquello que tanto le
gustaba. Son muchos los testigos que han afirmado que incluso han llegado a
hablar con él, pensando que era un botones normal. Otros cuentan que al ir a
darle la propina, el botones desaparecía.
Hay historias que incluso dicen que este, ha llegado a abrirles la puerta, para
desaparecer seguidamente.
Como la mayoría de los hoteles, este cuenta también con una
habitación maldita, en este caso es la 873, la cual no existe actualmente. Se
cree que esta habitación desapareció del hotel, cuando hace muchos años una
familia entera fue asesinada ahí dentro. Esta habitación solo existió cuando el
hotel todavía tenía la vieja estructura de madera. Se dice que cuando la policía
desprecintó la habitación, el personal del hotel la limpió por completo. Una
vez fueron a hacer la última inspección para dársela a unos clientes,
comprobaron que en el espejo de la habitación aparecieron las huellas de una
niña, por lo que la dirección del hotel decidió cerrarla para siempre, ya que
aunque limpiaban una y otra vez estas huellas, volvían a reaparecer. Son varios
los testigos que han asegurado ver una familia deambulando por el pasillo,
buscando su habitación.
Otros fenómenos paranormales a los cuales nadie ha
encontrado explicación han sido gritos en la noche, puertas que se abrían
solas, camas que aparecían deshechas sin haber nadie en esa habitación.
Víctor H.S.
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