Quiénes somos...

Mi foto
Equipo de investigación de fenómenos paranormales. Somos un grupo de personas serias y responsables que pretende no sólo demostrar la existencia de otras realidades paralelas a la nuestra y la vida más allá de la muerte, sino también el ofrecer ayuda desinteresada a aquellas personas que estén sufriendo molestias en sus hogares, lugares de trabajo, etc. por la presencia de entes negativos. Contamos con una ámplia experiencia de campo en multitud de localizaciones y emplazamientos por toda la geografía española. Disponemos de un variado y nutrido equipamiento técnico de calidad que ponemos enteramente a su disposición. No dude en contactar con nosotros enviando un correo a errantiainvesparanormal@gmail.com, le ayudaremos.

miércoles, 11 de junio de 2014

Retorno al Hospital antituberculosos de Valladolid


Hace apenas siete meses que comenzamos nuestras investigaciones en el equipo ERRANTIA, pero la primera siempre es aquella que de algún modo se recuerda de un modo especial. En esta ocasión nuestra primera investigación de ERRANTIA fue en el antiguo sanatorio antituberculosos  de Valladolid, por lo que decidimos volver hasta este lugar para ver si lográbamos aclarar esas preguntas que dejamos en el aire, ¿que querrían esas voces a través de la famosa caja de  los espíritus de nuestro investigador al que llamaron hasta en cinco ocasiones?, ¿se ahogaría alguien en la piscina como nos dijo?

Estas son solo algunas de las cuestiones que quedaron pendientes de respuesta, pero eran muchas más, por eso decidimos retornar hasta este lugar, que en su día tanto nos impacto, recordamos que el sanatorio abrió sus puertas  en la década de los años treinta o cuarenta, para tratar la tuberculosis. 

En su día fue uno de los centros más modernos para tratar esta grave enfermedad. Con el surgimiento de la estreptomicina, la tuberculosis puedo controlarse hasta el punto que este viejo sanatorio y otros hermanos suyos dejaron de tener abiertos, ya que suponían grandes costes, para una enfermedad que ya podía ser muy bien tratada. En el caso que nos ocupa, este lugar cerró en 1962, para caer en el olvido, hasta unos pocos años más tarde cuando el sanatorio  fue reconvertido en un colegio para niños que necesitaban ayuda especial.
En la década de los años ochenta, el edificio cerró para siempre. Hoy en día el lugar ha quedado para  los animales del lugar, los investigadores y los enemigos del misterio, debido a que ha sido vandalizado por completo.

Nosotros nos desplazamos hasta aquí en una calurosa tarde del mes de mayo, con un objetivo marcado, volver a comunicarnos con las entidades con las que ya hablamos la primera vez que estuvimos en este lugar e intentar conseguir que nos respondieran a todas esas preguntas que dejamos pendientes tras nuestra primera visita.

Como es habitual en nuestras investigaciones, fuimos primero de día, para realizar un barrido fotográfico y descartar las zonas en peor estado del edificio. Afortunadamente, el lugar no había sido mucho más destruido que en nuestra primera visita, algo que nos alegró tremendamente.

El sitio es tan grande, que incluso descubrimos varias zonas que no habíamos visto en nuestra primera investigación en este gran coloso. Las sensaciones que transmitía sin embargo eran las mismas, soledad, dolor y agonía. Debido a esto cerré los ojos e intenté volver a meterme mentalmente en la época en la que este lugar estuvo funcionando como un sanatorio antituberculosos y me recorrió un escalofrío por la espalda, pensando en todos esos pacientes que en su día estuvieron viviendo, sufriendo y en algunos casos muriendo en este hospital.

Tras un recorrido que duró aproximadamente dos horas volvimos hacia el coche, pensando en la noche, que ya estaba cercana. Durante la segunda parte de la investigación no estuvimos solos, ya que nuestros amigos Alberto y Nuria de, Misterio Estelar Valladolid nos acompañaron a dar una segunda vuelta por este sanatorio. A ambos les estamos muy agradecidos por habernos acompañado durante unas horas en este lugar.

Lo primero que hicimos al llegar los cuatro hasta al lugar, fue dirigirnos a realizar algunas pruebas a la antigua capilla del sanatorio, donde en nuestra primera visita más contacto tuvimos con la Spirit Box. En principio en esta ocasión y con el análisis aun pendiente no obtuvimos demasiadas respuestas, pero también os recordamos que así fue en la primera visita y que luego, varias voces que no oímos en el lugar interactuaron con nosotros. 

También realizamos en la capilla varias pruebas psicofónicas y tras unos primeros análisis de audio pudimos captar algunas voces psicofónicas, que podréis escuchar en el vídeo.  
Tras  unas primeras pruebas, junto a nuestros amigos de Valladolid, volvimos hacia los coches para realizar un descanso y hacer una primera conexión con el programa de radio de nuestro amigo Javier Belmar , Otros Mundos. Le estamos completamente agradecidos, por darnos la oportunidad de realizar esta conexión en directo, fue todo un placer.

Tras reponer fuerzas, nuestros investigadores volvieron al sanatorio en busca del misterio. Las primeras pruebas que realizamos ya de noche, las hicimos en la vieja piscina del sanatorio, donde en nuestra primera visita habíamos contactado con Ana, posiblemente,  una paciente que falleciera en este lugar y que pudo ahogarse en la piscina, como nos dijo a través de la Spirit Box en nuestra primera visita allá por el mes de noviembre . En todo momento estuvimos solos en este sanatorio, con la única compañía de los animales que habitaban el lugar.

Mientras realizamos unas pruebas psicofónicas, uno de nuestros investigadores, creyó ver lo que era una sombra, seguidamente, tan solo unos minutos más tarde uno de nuestros sensores de luz saltó hasta en dos ocasiones, en el mismo punto en el que en el mes de noviembre saltó. ¿Acaso las entidades que habitaban el lugar querían volver a hablar con nosotros?

Tras estas pruebas fuimos a realizar unas últimas pruebas en uno de los pasillos del sanatorio, donde realmente no nos quedamos indiferentes, ya qué tras intentar una comunicación, sin resultados aparentes, dos de nuestros sensores de luz y uno de nuestros medidores de campos electromagnéticos  saltaron misteriosamente hasta en tres ocasiones.


Estos hechos nos dejaron completamente perplejos, no lográbamos dar ninguna explicación racional a esto. Pese a no querer comunicarse con nosotros de este modo nos hicieron ver que no estábamos tan solos como nosotros habíamos pensado.
Tras volver a conectar, con el programa de Otros Mundos, bien entrada la madrugada abandonamos este inmenso lugar, que de nuevo no nos dejó indiferentes. Estoy convencido de que pronto volveremos, para seguir destapando todos sus secretos….

Víctor H.S.

Fotoreportaje Retorno al Hospital Antituberculoso de Valladolid










































Víctor H.S.